Cuidado Ocular y Ótico en Mascotas

En este blog hablaremos de dos zonas de tu mascota que necesitan cuidados especiales: sus ojos y oídos. Aquí te contamos lo que tienes que hacer para mantenerlos limpios y sanos.

Por ello, es fundamental saber detectar los signos de un problema de oído en tu mascota. Estas señales pueden incluir:

Ante cualquiera de estos síntomas, en primer lugar habla con tu veterinario para que le haga un chequeo, de manera que si hay un problema le pueda recetar una medicación adecuada que por lo general se soluciona con unas gotas o un limpiador de oídos.

¿Cómo limpiar las orejas de tu mascota correctamente?

En general, puedes limpiarle las orejas a tu peludo en casa sin la ayuda del veterinario. Para ello, sigue estas instrucciones paso a paso:

• Observar las orejas: Antes de la limpieza de oídos, es importante observar las orejas por dentro y por fuera. Busca posibles heridas o irritaciones en el pabellón de la oreja. Si no se deja tocar las orejas, quizá porque le duelen, pídele al veterinario que se las limpie.

• Aplicar solución de enjuague: No utilices jabones convencionales ni soluciones con alcohol, ya que estos dañan las pieles sensibles y pueden provocar irritaciones dolorosas. Se recomiendan los limpiadores óticos especiales, adaptados a la piel del oído de las mascotas.

• Masajear la solución de enjuague: Para que las partículas de suciedad de las profundidades del oído se disuelvan, deberás aplicar la solución dando un masaje. Para ello, sujeta la base de la oreja con los dedos y aplica la solución amasando y masajeando.

• Eliminar la solución con paños: La suciedad disuelta con el enjuague se puede eliminar con un paño suave o gasa. Nunca utilices cotonitos de algodón, ya que estos pueden dañar las estructuras auditivas internas, ni algodón ya que pueden quedar restos dentro del canal auditivo.

¿Qué debo tener en cuenta?

Los oídos de los peludos suelen ser muy sensibles. Para evitar lesiones o infecciones, es importante tener mucho cuidado durante la limpieza de oídos. Usa únicamente productos especializados. Si consideras que no estas totalmente capacitado para hacer la limpieza por ti mismo acude siempre a un veterinario y sigue sus consejos.

Los perros de orejas grandes y caídas y con abundantes pelos en el interior del oído tienen más predisposición a sufrir otitis externas. Para prevenirlas es muy importante depilar el interior del conducto auditivo (en el caso de que tu mascota tenga muchos pelos en el interior del oído) y realizar limpiezas óticas regulares con los productos adecuados. Un lavado a la semana es suficiente para mantener los problemas de oído controlados. 

 

Limpieza de ojos en perros y gatos

Nuestras mascotas tienen una sensibilidad particular a nivel de los ojos y este órgano requiere atención diaria. Por lo tanto, es importante limpiarlos con regularidad. La conjuntivitis es una de las enfermedades oculares más frecuentes en clínicas veterinarias.

Los ojos sanos generalmente se muestran claros y brillantes y como norma general son simétricos (incluyendo las pupilas). Si tu mascota cierra mucho los ojos o mantiene un ojo cerrado es síntoma de que tiene un problema ocular.

Otras señales pueden ser:

Ante cualquier cambio en los ojos de tu mascota, lleva a tu amigo al veterinario tan pronto como sea posible ya que los problemas oculares pueden empeorar rápidamente.

Presta atención al pelo que hay alrededor del área del ojo que entorpece la visión, una buena idea para ayudar a prevenir la irritación es recortar estos pelitos. Esto debe ser hecho siempre por un veterinario o peluquero profesional de mascotas.

Y de igual manera que te lavas las manos y sigues los protocolos de higiene cada mañana, debes quitarle las legañas a tu peludo para que no se le acumulen y se le infecten.

Además de la conjuntivitis, es importante estar atentos siempre a cualquier señal de problema ótico u ocular, algunos de los más comunes son:

• Úlcera corneal: se produce una lesión grave en la córnea si la mascota sufrió algún traumatismo o infección. Mostrará dolor, ojos irritados, lagrimeo e intolerancia a la luminosidad.

• Glaucoma: se trata de una elevación de la presión ocular que puede dar lugar a cambios en la retina, ocasionando pérdida de la visión. Puede ser causado por factores genéticos o secundarios a otros procesos. Se llegan a observar unos ojos irritados o rojos, la pupila dilatada mostrando dolor de forma evidente.

• Cataratas: la gran mayoría de estas son por causas hereditarias y son más frecuentes en perros que en gatos. También pueden aparecer en animales con diabetes, por deficiencias nutricionales o ser secundarias a otras enfermedades oculares. Pueden darse junto con un aumento de la presión ocular, ocasionando una catarata glaucoma. Los síntomas serán sobre todo la apreciación de opacidad en el ojo o la presencia de pequeños cristales dentro, y la sensación de pérdida de visión, sobre todo por las noches o en momentos de escasez de luz.

En cualquier caso, es necesario preocuparse y cuidar la salud ocular de mascotas para garantizarles la mejor calidad de vida posible.